El cielo es el límite para operadores cuando se trata de especulaciones financieras. Utilizan métodos de casino o descuidan la gestión de riesgos. A veces se adentran en las matemáticas en busca de patrones en el comportamiento obviamente caótico del mercado. Dondequiera que lleve el camino del conocimiento, siempre conduce a nuevos descubrimientos.
Bill Williams puede considerarse el fundador de la Teoría del Caos. Fue el primero que sugirió el uso de fractales en las operaciones. Los fractales son algunas formaciones geométricas cuya característica principal es la autosemejanza, es decir, se forma una estructura a gran escala a partir de elementos más pequeños. Esta estructura repite la forma de formaciones más pequeñas. La teoría dice que esta es la propiedad particular sobre la que se basa todos los elementos naturales, desde el lecho del río hasta las células del cerebro humano.
¿Cómo pueden ser útiles los fractales en las operaciones? Puede observar muy a menudo que algunos de los patrones en los gráficos aparecen con una regularidad sorprendente en proporciones grandes y pequeñas. De esta forma, se puede concluir que el mercado repite sus movimientos al cabo de un tiempo de forma similar a elementos ya existentes. Si determina estas cifras, los pronósticos pueden ser más precisos y, por lo tanto, pueden usarse a su propia discreción. Bill Williams sugirió definir un fractal de Forex como varias velas, una de las cuales será un mínimo o un máximo local en un período de tiempo dado. En aras de la simplicidad, desarrolló un indicador que se hizo muy popular. En estos días, se dice que es una herramienta estándar para la plataforma de operaciones MetaTrader4.
Hoy, la Teoría del Caos se ha desarrollado en una nueva forma que se ha alejado bastante de la idea inicial de Bill Williams. Sin embargo, el punto principal siguió siendo el mismo: la búsqueda de patrones autosimilares en los gráficos predice el movimiento de precios. Dentro de la Teoría Fractal moderna, los operadores no buscan fractales, sino mónadas, formaciones que son más grandes que cinco o seis velas basadas en la autosemejanza. Además, la Teoría del Mercado Espejo, la rama de la Teoría Fractal, fue aún más lejos al afirmar que el mercado se refleja a sí mismo al llegar a ciertos puntos. Los ejemplos proporcionados por el mercado son asombrosos. Es sorprendente cuán preciso puede ser el pronóstico construido sobre esta teoría. Además, los partidarios de los mercados espejo dicen que el mercado ya ha tenido en cuenta incluso eventos impredecibles de carácter fundamental. Un ejemplo típico es el ataque terrorista en Londres: el gráfico de divisas no mostraba ningún trasfondo técnico para un pico, pero antes de esto, los indicadores espejo apuntaban a un fuerte impulso.
